sábado, febrero 04, 2006

Así escriben las pijas de mi instituto

Las pijas de mi clase han escrito este documento y lo han colocado en internet. Como no paran de criticar a todo el mundo, creyéndose que ellas marcan estilo y que son el centro del universo, me he dedicado a corregir esta narración para para que ustedes vean que no hay ser más estúpido que la raza pija. Lo de cursiva son añadidos míos.


V MARCHA A GUADALUPE
Por Sara G., Mila , Sara M. y Elena

¡Llegó el día! Todos los alumnos de 1° de bachillerato (mentira sólo fuimos la mitad de todos los alumnos de primero) estábamos preparados “con la casa a cuestas” (nueva mentira, la gente “normal” entre la que me incluyo, como íbamos a hacer una caminata de 70 Km., llevábamos lo indispensable pero como ellas son unas pijas se llenaron las mochilas de cosas inútiles) para realizar un duro e inolvidable viaje, con la grata compañía de nuestros agradables profesores (putas pelotas). En nuestro rostro estaba reflejada la alegría y a la vez la incertidumbre de la prueba a la que íbamos a ser sometidos. Después de dos horas de viaje, entre risas y cantos, llegamos a nuestro lugar de partida. Un pueblo muy acogedor llamado ROMANGORDO donde muy amablemente nos invitaron a un gran desayuno para empezar con mucha energía nuestra grandísima caminata... (¿qué coño pintan aquí los puntos seguidos?) Luego todos nos sentamos en unas escaleras, para hacernos la foto de salida. Visitamos la “gran” iglesia del pueblo con su valioso artesonado mudéjar y tras tocar las campanas (que conste que ellas no tocaron las campanas. ¿Cómo iban a tocarlas con los sucias que estaban las cuerdas? Vaya ordinaried. Las campanas las tocó el campanero del pueblo) y con un enorme aplauso de todos, iniciamos nuestra marcha que pronto se interrumpió, porque nuestros profesores nos dieron el maravilloso consejo (atentos) de atarnos bien apretadas las zapatillas (Y me pregunto, ¿Cómo se atan las zapatillas? Yo me ato los cordones no las zapatillas y creo que todo el mundo, menos cuatro pijas, hace lo mismo),exactamente como las llevan los “palurdos” (¿Y estas comas? Según han puesto el término “palurdo” tiene un significado connotativo, es decir, un significado que no recoge el diccionario. Palurdo como recoge el diccionario significa que no tiene educación. Es una palabra despectiva. No se que otro significado tendrá la palabra “palurdo”, acorde con este contexto. Se nota que las pijas tienen una jerga un poco extraña.Conclusión: que se metan las comas ... Lo ves, aquí los puntos seguidos estan bien puestos.) Aceptamos el consejo y continuamos con nuestro objetivo.

La primera parte del viaje, todos andábamos con mucha energía, haciendo bromas y cantando. Todos empezamos a tener nuestros primeros traspiés y por fin llegó la hora de nuestra merecida comida... (insisto, ¡ qué coño pintan los puntos seguidos!)y con los pies al aire y las primeras ampollas descansamos un rato.(No conocen otro nexo aparte de la “y”. Esto es flipante, se “atan las zapatillas” como palurdas y tienen ampollas, que delicadas son las pijas) Ya un poquito resentidos continuamos nuestra marcha sin parar, pasando por diferentes caminos y viendo la “flora y fauna” (¿Y estas comillas?) del entorno muy desconocido para algunos. Llegamos al río en el que unos nos refrescamos, otros se tropezaron y otros hasta llegaron a sentir la helada agua sobre ellos (ellas dicen que se refrescaron cosa que es cierto porque nunca he visto a ser más patoso para cruzar un maldito río.Terminaron caladas, es decir ellas pertenecen al tercer grupo. Que no se anden con tonterías). Seguimos nuestro viaje sin cesar en el que, unos más rápido y otros más lento, unos más contentos y otro más cansados llegamos a ROBLEDOLLANO donde una enorme nave, con una bonita chimenea, nos iba a acoger en esa fría noche. Nos aseamos (Nos aseamos los demás, ellas se peinaron, maquillaron, retocaron,... cómo si se fueran a la disco. No hay nada más penoso que unas pijas arregladas en mitad del campo, es ridículo), cenamos... y pronto empezamos a notar el verdadero cansancio, pero a pesar de todo nos montamos nuestra pequeña “fiestecilla”.

Cuando decidimos acostarnos era imposible conciliar el sueño puesto que no parábamos de hablar y alguno que otro no paraba de roncar.

A la mañana siguiente recogimos todo y comenzamos. Nuestro destino: GUADALUPE. Aunque las fuerzas flaqueaban, la ilusión era más fuerte que el cansancio. Después de mucho andar y andar, llegó la hora de la comida (por cierto, no recordamos otro almuerzo más deseado que ese)(Vaya glotonas, se pusieron hasta el culo de comer. Como vacas). Después de curar nuestras pequeñas molestias (eso les pasa por “no atarse bien apretadas las zapatillas”) comenzó la parte del camino más dura: ¡montaña arriba! Y en el jeep seguían yendo únicamente el equipaje y el simpático conductor. Ayudados de palos, como los grandes peregrinos (se piensan que por coger un simple palo te conviertes en peregrino),llegó la hora de descender todo lo que habíamos subido. Por un camino muy estrecho y uno detrás de otro llegamos a la deseada carretera y por fin vimos el cartel de GUADALUPE y a lo lejos estaba el pueblo que no parecía llegar nunca (lo que les gusta la conjunción “y”). Dándonos ánimos unos a otros conseguimos nuestra meta: nuestros pies pisaban el lugar esperado. Con las miradas atónitas de los cacereños (puedo asegurar que no había mas de veinte personas del pueblo y pasaban de nosotros cómo la mierda) entramos a la basílica donde vimos a la virgen de Guadalupe y muy ilusionados le pedimos nuestros pequeños deseos (se piensan que son el centro del mundo, había gente no religiosa entre los que me incluyo que no rezó, es mas, la mayoría de las personas no pedimos nada a la virgen). Después de la foto de llegada, con las caras muy cansadas, cogimos nuestro querido autobús con ¡¡¡rumbo a Madrid!!! (Pensaba que las pijas ponían los nombres propios con mayúsculas. Vease: ROMANGORDO, ROBLEDOLLANO Y CUADALUPE, pero ahora saltan con Madrid. Debe ser que las pijas escriben los nombres de los pueblos con mayúscula y los de las ciudades con mayúscula incial (cómo lo hace todo el mundo)).

Fue una experiencia inolvidable que volveríamos a repetir.

PD: esos tramposillos que se agarraron al Jeep... quedan perdonados. (Impresionante, se perdonan a ellas mismas).


CONCLUSIÓN: Las pijas dan asco y que se vayan todas a ... (seguro que no pillan estos puntos seguidos) ah, se me olvidaba un consejo de amigo: no olvideis "ataros bien apretadas las zapatillas antes de salir de casa", que después teneis ampollas.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Eres genial.

demencial dijo...

Muchas gracias por leerme.